Levitas modernos

ASHER_TIAN Jue Jun 11, 2009 4:00 am

Levitas modernos

Y el templo de Dios fue abierto en el cielo, y el arca de
su pacto se veía en el templo. Y hubo relámpagos, voces,
truenos, un terremoto y un grande granizo. Ap 11: 19

Por: Christian González Mejía(Asher_tian)

Como los antiguos levitas, los estudiosos del instituto Ben-Zvi (moderno Templo) están en busca de un códice llamado Aleppo, una antigua versión de la Biblia judía, que según algunos investigadores es más importante que los manuscritos del mar muerto, ya que datan del año mil (aprox). Los modernos levitas no sólo custodian (parte del Códice Aleppo que ya se encuentra en Israel), y coordinan la búsqueda de las 196 páginas que faltan, sino realizan interesantes estudios al códice.
Hace 50 años, aproximadamente, cuando se fundó el actual Estado de Israel en Palestina, el códice
llegó a Israel, de la misma manera que el arca llegó al templo que había sido construido por Salomón. Estos dos objetos tienen una gran importancia para el pueblo hebreo.
El arca, por ejemplo, era una especie de urna de madera recubierta de oro, en la cual se depositaban cosas de gran valor como el maná, las tablas de la ley, y la vara de Aarón, ésta representaba
la presencia de Dios en la tierra y se encontraba resguardada en el lugar santísimo del tabernáculo, primeramente,y después del templo (antiguo instituto de Ben Zvi). El arca del pacto fue alguna vez tomada por los filisteos como parte de un botín de guerra, en esa misma batalla perdieron la vida Finees y Ofni, hijos de Elí (descendientes de Leví, antiguos levitas) encargados de resguardarla y protegerla.
Los fílisteos la guardaron en el templo de Dagón, estando ahí por varios días, vieron
que la imagen de su dios en las mañanas no estaba en su lugar alto, sino en el suelo y frente al arca del Dios de Israel, en el tiempo que estuvo en Asdod los habitantes de la ciudad morían o enfermaban, por esa razón decidieron regresarla.
Tal fue el miedo que no la devolvieron sola, sino con la cuota necesaria para la expiación; se construyó, por consejo de los príncipes filisteos, un carro especial en donde montaron el arca, por miedo, ningún habitante de Asdod la llevó, la dejaron ir sola en el lomo de dos vacas.
Forma inusual de recuperar éste preciado objeto, verdad, pues algo similar ocurrió con el Aleppo, pues tres días después de que se dio a conocer el decreto de la ONU aceptando la construcción del Estado de Israel, una turba siria indignada por la resolución quemó la sinagoga en donde estaba la reliquia, los judíos de Aleppo lograron rescatarla, siendo una congregación de más de diez mil personas, fue muy fácil que se dividiera y finalmente se extraviara(n) (algunas páginas).
En 1982 se encontró una página completa y un fragmento que había sido portado por un residente de Brooklyn, llamado Sam Sabbagh, quien durante años lo cargó como amuleto de buena suerte.
Algunos esfuerzos previos por parte del cuerpo de inteligencia israelí (Mossad) y de algunos diplomáticos sraelíes no tuvieron frutos, ahora, se conforma un grupo de búsqueda en el que se incluye algunos de los judíos de Aleppo, quiénes han tenido la fortuna de ganarse la confianza de la comunidad y, han logrado recabar información importante.
El Códice Aleppo, tiene cuatrocientos noventa y una páginas de pergamino de unos treinta centímetros de largos por unos veinticinco de ancho, fue transcrito alrededor del año 930 por Shlomo Ben Boya´a y editada por un famoso erudito de la época, Aarón Ben-Asher. La conclusión de este manuscrito señaló el fin de un proceso, que tenía como fin la fijación de la Biblia hebrea
Éste perteneció a la comunidad judía de Jerusalén hasta que fue robada por los cruzados
que capturaron y saquearon la ciudad en 1099 d.C., después de pagarse el rescate, el documento fue llevado al Cairo donde fue usado por el judío Maimónides, quien declaró que era la copia más precisa del Antiguo Testamento.
La búsqueda se lleva acabo en América, norte y sur, ya que ahí han aparecido los dos fragmentos más recientes, no se duda que algunos fragmentos estén en posesión de privados o coleccionistas (nuevos filisteos), esperamos que no suceda lo mismo que con los antiguos, y que no se tengan que ver envueltos en enfermedades y mortandad para regresar el manuscrito.
Podemos preguntarnos si las catástrofes en América (crisis económica, política y social, así como: enfermedades, tragedias naturales, narcotráfico, etc.) son consecuencia “del robo” (retener) el Códice Aleppo. Tal vez, los americanos (modernos filisteos) no nos hemos percatado que nuestro dios Dagón (economía americana y sudamericana) está en el suelo frente al arca del testimonio (economía judía) manifestando su deseo de regresar a casa.
Esperemos que pronto se encuentren las páginas faltantes, por que comienzo a recordar algunos pasajes bíblicos, no tan idílicos, como Génesis 19, Lamentaciones 1, Oseas 13, que mucha semejanza guardan con la realidad postmoderna, y sinceramente no me agradaría verme envuelto más en esta metadiégesis bíblica.